Hemos hablado mucho de la importancia de la recogida de aceite en Barcelona para su reutilización y reciclado, y de lo contaminante que es este residuo para el medio. Ya sabes, un litro de aceite usado vertido puede contaminar mil litros de agua, haciéndola inservible para cualquier uso y provocando la destrucción de la vida en ríos y lagos.

Esta vez no vamos a centrarnos en la recogida de aceite en Barcelona, sino en los efectos que tiene deshacernos mal de él. Es decir, el típico gesto de verterlo por el fregadero de la cocina o el inodoro.

Te lo explicamos con un ejemplo. Seguramente en tu nevera haya habido alguna vez un producto rico en grasa o aceite. Puede ser una conserva, una fiambrera con los restos de un guiso o cualquier otra cosa similar. ¿Cómo ves esa capa de aceite? Con el frío se hace pastosa e incluso puede solidificarse.

Eso es lo que pasa cuando tiras aceite por el fregadero. El aceite mezclado con el jabón forma un producto más pastoso todavía, que al pasar por la tubería se enfría, se adhiere y se queda ahí pegado. Con el tiempo esta capa sólida se va engrosando con más y más grasa y restos de jabón, y retiene otros residuos sólidos, hasta el punto de que la tubería queda totalmente atascada. Puede reventar, abrirse por cualquier punto o simplemente inundar la vivienda o local.

Un pequeño gesto se convierte en una catástrofe y en un dineral gastado en fontanería y posibles obras. Imagina la suma de pequeños gestos en cada vivienda de un edificio y su efecto en el colector comunitario. Desde Reciclados Deter-Oil te lo dejamos claro: la única medida es no verter aceite por los desagües. Resérvalo en botellas para reciclarlo o, a las malas, para tirarlo con la basura. Por ti, por tus tuberías y por el medio ambiente.